Valencia.- Niuman Romero no hace conjeturas sobre el rival que enfrenta Caribes, en el inicio de los playoffs de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Todos los equipos clasificados tienen posibilidades de seguir avanzado en la postemporada, así que evita la etiqueta de “favorito”.

Magallanes terminó con el mejor registro de la liga en diciembre (14-7), pero Anzoátegui llegó a ganar 11 de 12 partidos, incluida una racha de siete triunfos, que lo llevó a comprar el ticket para su viaje a enero, antes de ser detenido por los Tigres de Aragua en doble jornada el domingo de la semana pasada.

Fue una campaña de altibajos para los orientales, pero el Capitán de la Tribu piensa que lo importante en la fase de playoffs es aprovechar el impulso que alcanzó el grupo en el último mes de la ronda regular, cuando dejó balance de 12-9. Así que pese a la abultada derrota del jueves contra la nave, Romero cree que Anzoátegui puede superar al conjunto eléctrico, pues la serie todavía es joven.

El infielder sabe de qué habla, si Anzoátegui logra dividir en Valencia, regresará a Puerto La Cruz con el ánimo intacto. En su sede suma 12 victorias en sus últimos 16 juegos en playoffs (sin contar finales), siete de manera consecutiva y saldo de 20 triunfos en sus últimos 27 partidos en el Estadio Alfonso “Chico” Carrasquel, de acuerdo con una investigación del periodista Marcos Grunfeld.

“Tenemos que seguir jugando con ese mismo ímpetu que nos ha caracterizado. No sólo en estos últimos partidos, sino desde siempre. En esta fase poco importa el rival a quien te enfrentes, pues para quedar campeón hay que ganarle a todos los equipos a los que te mides. Queda de nosotros jugar como siempre lo hemos hecho, para que así lleguen los resultados que queremos”, indicó Romero.

El 15 de diciembre, Caribes marchaba con récord de 21-29, a tres juegos de la clasificación, y lucía liquidado. Pero pese a que el camino era bastante oscuro durante esas fechas, el club nunca dejó de confiar en que podía lograr la hazaña de estar en la postemporada por novena ocasión consecutiva, la racha más larga desde que Magallanes apuntó su nombre en enero 13 veces consecutivas, entre las zafras 1989-1990 y 2001-2002.

“Lo que nos pasó es algo bien difícil de explicar, lo único que puedo decir es que este equipo nunca se rinde”, señaló Romero, sin ocultar su satisfacción. “Somos un grupo de guerreros que pelea desde el primer inning hasta el último y, gracias a Dios, se nos dieron las cosas en la recta final. Jugamos de una gran manera y los resultados llegaron. Es lo que hemos empleado todos estos años para obtener las victorias y los campeonatos y nos sigue funcionando, así que hay que seguir manteniendo esa mística”.

En la 2017-2018 pasó algo similar, aunque sin el dramatismo de esta campaña. Anzoátegui cerró con ocho triunfos seguidos, mientras ganaba nueve de 10 desafíos. Luego, en los playoffs dejó en el camino a Magallanes (4-2), a Leones del Caracas (4-1) y Cardenales de Lara (4-2), para alzar la copa de campeón.

Pero, eso está en el pasado y Romero aspira que él y sus compañeros escriban una nueva historia.

Niuman Romero ha formado parte de los tres equipos campeones de Caribes

“Fue una de las rondas eliminatorias más duras de los recientes nueve años. La forma como llegamos a los playoffs me tiene motivado y pienso que esta fase será mejor que la regular”, acotó Romero, que exhibe una línea vitalicia de .305/.405/.395, en 533 apariciones legales en postemporada.

Caribes cuenta con una alineación muy parecida a la de 2018, con algunos matices. René Reyes y Luis Jiménez no produjeron de acuerdo con sus estándares de campañas anteriores, pero la novena acaba de sumar a Oswaldo Arcia y esperan buenas noticias en las próximas horas para una posible incorporación del slugger Balbino Fuenmayor.

Aunque más allá de las individualidades, es el comportamiento de colmena, el sentido de trabajo en equipo, lo que ha rendido frutos para los orientales. Desde la 2010-2011, Caribes ha disputado cuatro finales y ganado tres, más que cualquier de los otros ocho equipos del circuito. Nunca fue favorito.

“En esta fase tenemos que ser muy inteligentes. El trabajo es, sobre todo, mental y de mucho enfoque, especialmente en los instantes de presión, en los que debemos sacar lo mejor de nosotros. Estamos en un buen momento y con un gran nivel. Espero que lo sigamos alargando este mes”, abundó.

“Vamos a paso a paso, juego a juego. No somos los favoritos, no nos sentimos de esa manera, nunca ha sido así, pero cuidado con Caribes”, agregó.